La Poda
La poda es uno de los cuidados habituales que requieren las plantas.
Consiste en suprimir brotes y ramas. La tarea se realiza con distintos fines:
para limpiar la planta de hojas y flores marchitas, para darle una forma
equilibrada o para estimular su crecimiento. No es una operación que entrañe
riesgos para el ejemplar, siempre y cuando no se intervenga en las ramas
estructurales. Por tanto, es posible cortar en cualquier época del año un brote
mal colocado o ajado, aunque es recomendable esperar a la parada vegetativa de
la planta para las intervenciones más contundentes.
Beneficios
Tras podar una planta, las partes en las que se interviene reciben un
flujo abundante de sabia. Cuando esto ocurre, el ejemplar crece y recupera el
vigor perdido. Por tanto, cuanto más se pode, rebrotará con mayor intensidad.
Esta máxima no es aplicable a las plantas domésticas de interior. En este caso,
la poda debe moderarse ya que en ocasiones las condiciones ambientales no son
todo lo favorables que deberían para potenciar el desarrollo de los ejemplares
podados.
La poda debe combinarse con otra serie de cuidados complementarios. Los
riegos han de ser abundantes y deben estar acompañados de un aporte de abono,
en concentración baja. La planta tiene que recibir buenas dosis de luz solar,
la temperatura ambiente debe ser elevada y los niveles de humedad en el aire
tienen que ser altos.
Periodos de poda
El desarrollo de las plantas de interior se divide en dos periodos de
tiempo. En general, desde mediados del mes de marzo hasta finales de septiembre
se desarrolla la época de crecimiento, también conocida como vegetación.
Mientras que entre octubre y marzo, la planta se encuentra en reposo o en
parada vegetativa.
Las podas de poco alcance se pueden realizar con independencia de la
época en la que se encuentre el ejemplar. Si bien es recomendable que durante
el periodo de crecimiento sólo se efectúen intervenciones suaves en los brotes
jóvenes. Las podas más drásticas que persiguen equilibrar la estructura de la
planta y darle otra forma, deben realizarse al final del reposo vegetativo. Así
las yemas rebrotan con mayor facilidad y más rapidez.
¿Cómo podar?
La finalidad de este tipo de intervenciones es provocar la formación de
un brote en el lugar donde se cortó. Por eso, es apropiado podar por encima de
una hoja o a la altura de la yema.
Si la planta se poda para que adquiera una determinada forma, el corte
debe realizarse por encima de una rama o de un brote para garantizar la
continuidad del desarrollo y facilitar que el ejemplar, poco a poco, adquiera
la orientación que se desea.
Herramientas a utilizar
- Una navaja nueva y
desinfectada.
- Canela en polvo.
Procedimiento
Desinfectar la navaja a utilizar y proceder a hacer un corte en la rama a aproximada 10 del tronco, de manera que el corte se haga de manera diagonal, secar la savia que al corte se producira y poner en el corte un poco de canela en polvo que ayudara a cicatrizar y a mantener a los hongos que pudren a las plantas lejos de la misma.
En el video anterior Apolonia Grade dice que despues de la poda en la
siguiente Luna creciente la savia volvera a subir produciendo un brote de ramas
bastante favorable.